Mi amigo se vino dentro de mi esposa y yo termine de batir su leche con la mia
9,643 Lecturas
Al principio solo me puso cachondo que uno de mis amigos no le quitara la vista a mi esposa Vanessa, después de un tiempo me excitaba la idea de verla cogiendo con otro hombre. Hasta que hace 4 años contagie a Vanessa con mi fantasía y cada cogida tenia que incluir imaginarla con otro hombre. Tardamos un tiempo en hacer realidad nuestra fantasía porque Vanessa tenia un poco de temer a que después yo se lo reprochara. Pero yo estaba seguro que deseaba verla no solo con otro, sino con una multitud de hombres que desfilaran entre sus piernas. Creo que al principio para las mujeres es un poco difícil entender que nada tiene que ver lo que sentimos con ellas con el hecho de que se acuesten con otros. Pero si tu chica es caliente siempre terminan por aceptar que puede disfrutar de otros sin riesgo a perderte, al contrario, se terminan dando cuenta que entre mas puta mas la vas a amar.
Vanessa es joven y guapa, tiene 26 años mientras yo ya tengo 33, tenemos solo una hija de 5 años, pero el cuerpo de Vanessa no parece de alguien que ya tuvo hijos. Nunca nos han faltado candidatos que estarían encantados de cogerse a mi esposa, pero aunque a mi daba igual quien le metiera la verga, en ese entonces Vanessa era un poco mas selectiva. Aunque le gustaban muchos, tardo en sentirse convencida con uno de ellos, pero finalmente comenzó un juego de coqueteo con uno de mis amigos. Las cosas llegaron a un punto donde Ignacio no aguantaba y entonces Vanessa se lo soltó. Si queria cogérsela tendría que estar yo presente, de entrada no quiso, pero al día siguiente yo hable directamente con el y entendió que era una fantasía nuestra.
Esa primera vez que ves a tu mujer besándose con otro, que miras como la manosean excitados y deseando cogérsela mientras ella se deja llevar, es sin duda la mas emocionante. Esa primera vez cuando vi como mi amigo comenzó a desnudar a Vanessa mientras ella le jalaba la verga me provoco una erección como nunca la había tenido. Ella ya desnuda se puso de rodillas y sin dudarlo un segundo le comenzó a mamar la verga con una ansiedad que nunca le había visto. Solo fueron unos minutos antes de que ella se acostara boca arriba y mi amigo quien también ya estaba desnudo se pusiera entre sus piernas.
Aun tengo en la mente esa imagen de las hermosas piernas de Vanessa con su piel blanca abiertas y flexionadas mientras Ignacio acomodaba su verga para metérsela. Supe que por fin estaba dentro de mi esposa cuando ella dio un ligero gemido mientras lo abrazaba al mismo tiempo. Mi semen ya no pudo estar dentro de mi verga y me vine con las primeras metidas de verga que Ignacio le daba y mi linda Vanessa. Pero no tarde prácticamente nada en volver tener mi erección tan dura como minutos antes y esta vez yo me moví al final de la cama para poder ver como la verga de mi amigo entraba y salía de la panocha de Vanessa.
Me hubiera encantado grabarlo, tener el recuerdo en un video, pero Vanessa no queria y hasta la fecha no quiere que la grabe, dice que prefiere el recuerdo en su mente. Por unos segundos reaccione al hecho de que mi amigo no tenia un condón puesto, nunca lo hable con Vanessa. Pero no me molesto, al contrario, se me hizo mas cachondo saber que al final mi esposa terminaría con el semen de mi amigo dentro de ella. La primera vez que me vine no necesite ni masturbarme, pero mirando como mi amigo cada vez aumentaba la fuerza con la que se cogía a Vanessa y como ella le pedía que siguiera, tuve que hacerlo. Esta segunda vez me vine mirando como la verga de mi amigo se enterraba una y otra vez en la panocha de Vanessa que estaba toda mojada.
Me regrese a la silla al costado de la cama para terminar de ver como mi amigo usaba a mi esposa y enfocaba mi mirada en ver el cuerpo de Vanessa retorcerse de placer. Ella lo abrazaba con sus piernas estirando las puntas de sus pies mientras mi amigo comenzaba a sudar y el sudor caía en la cara de mi esposa. Ignacio estaba muy excitado y no bajaba su intensidad, Vanessa busco la boca de mi amigo y lo beso mientras por primera vez con los ojos buscaba mi mirada. Mientras me veía en medio del beso con mi amigo, le dije sin hablar que la amaba y sin dejar de besarlo con una de sus manos me indico que me uniera a ellos. Yo le dije con la cabeza que no y le enseñe que me estaba masturbando de nuevo buscando venirme una tercera vez.
Ellos se giraron para que Vanessa lo montara, nuevamente me puse al final de la cama para ver otro ángulo de la cogida que estaba disfrutando mi esposa. Me comencé a masturbar con mas fuerza, mirando de cerca como la verga de mi amigo le entraba en la panocha a Vanessa. Cuando mi amigo no pudo mas se vino pero Vanessa estaba a punto de tener un orgasmo y no dejo de moverse, entonces vi como la leche de Ignacio salía de la panocha de mi esposa. Mi verga ya no pudo mas mirando la erótica escena y soltó un tercer chorro de leche. La leche de Ignacio le escurría por todo lo largo de su verga que comenzaba a aguadarse. Vanessa no pudo venirse, se dio cuenta que la verga de Ignacio ya no podía mantenerse dentro de ella y se tumbo a un lado de el.
Ignacio no había hablado durante la cogida, fue hasta que Vanessa se quito de encima de el que dijo que era una mujer increíble y que cogía delicioso. Nos pidió permiso de darse un regaderazo porque estaba empapado en sudor y apenas entro al baño, Vanessa me llamo para que me pusiera entre sus piernas y terminara el trabajo que mi amigo dejo pendiente. En medio de un intenso beso le metí la verga a mi esposa y podía sentir lo mojada que estaba, en parte por sus propios líquidos y en parte por el semen de mi amigo. Apenas entre en ella, Vanessa me pregunto si me había gustado verla coger y no pude responderle otra cosa que si y que nunca había estado tan excitado en mi vida. Le dije que me había venido 3 veces mirando como se la cogía Ignacio y ella me dijo que le había encantado sentir que me excitaba mirándola.
No me aguante decirle que estaba orgulloso de tener una puta como esposa y que queria verla con muchos, muchísimos hombres diferentes. Vanessa me aseguro que cogería con todos los que yo quisiera, que siempre seria mi puta y que podía prestarla con quien fuera, pero que solo me pedía que nunca la dejara. Nuestra cogida no fue muy larga, yo tenia la verga a punto de reventar, pero también Vanessa y pudo venirse poco antes que yo. Cuando por fin me vine dentro de ella, le dije que me encantaba revolver mi leche con la de Ignacio dentro de ella. Y me encanto su respuesta “Si mi amor, me encanta tener dentro de mi tu leche y la de Ignacio adentro, me vine pensando que iba a tener la leche de los dos adentro”. También le dije que me había excitado ver cuando Ignacio se vino dentro de ella y ver como le escoria la leche cuando aun tenia la verga adentro. Ella me pregunto si no estaba enojado porque se le olvido pedirle que se pusiera condón, pero le dije que al contrario, que eso era lo que mas me había puesto cachondo.
Por esos momentos salió Ignacio del baño y dejamos de platicar Vanessa y yo de eso, pero le pregunte que le había parecido cogerse a mi esposa. Ignacio no dejaba de hacer halagos a Vanessa, decía que estaba buenísima y que cogía delicioso. La platica siguió por unos minutos mas hasta que las caricias de Vanessa nos pusieron cachondos a los dos y comenzamos lo que fue nuestro primer trio. Fue una noche de no parar de coger y las primeras 3 horas del hotel se fueron volando y pagamos otras tres que utilizamos al máximo.
Vanessa y yo llegamos a la casa en la madrugada y aun teníamos ganas de seguir cogiendo y estando solos ya pudimos hablar de nuestra experiencia y lo que nos había gustado. Por muchas fantasías previas que tuviéramos, la realidad era mas excitante y nos abrimos hablando de cosas que nos faltaban por aclarar. Finalmente esa primera experiencia nos abrió las puertas muchas otras experiencias que hasta la fecha disfrutamos. Poco a poco Vanessa cambio mucho de lo que era cuando la conocí, se volvió mas segura al usar ropa sexy o al coquetear con alguien. Sus estándares bajaron porque entendió que sus amantes son solo para algunas noches y que a veces los que mas cachonda la ponen no son los que mas le gustan.
En cuatro años no deja de fascinarme ver a Vanessa arreglándose para encontrarnos con algún hombre, verla coquetear y después ver como se va excitando con las caricias y besos de otros. Me encanta cuando ella se pone de rodillas para manársela a alguien y como comienza a ponerse roja cuando mas excitada esta. Esa excitación de ver cuando finalmente se acuesta en la cama con o sin ropa y abre sus piernas para que alguien se ponga entre ellas es única. Pero lo que mas me excita es ver como alguna verga entra y sale de ella empapada con sus jugos hasta que finalmente se vienen dentro de ella. Eso es lo que mas me encanta además de al final ser yo el que le de la ultima cogida y meter mi verga en su panocha llena de leche de uno o dos hombres.
Si me gusta participar y hacer un trio o cuarteto, pero antes me gusta que ella este con sus amantes sola y que disfrute a sus anchas. A final de cuentas yo no tengo prisa, se que después de una noche llena de sexo a mi me sigue tocando lo mejor de mi esposa. Además el saber que ha cogido con unos 35 o 40 hombres diferentes y que me sigue prefiriendo a mi, me hace sentirme seguro de ella y de lo que siente por mi. Aunque no han faltado los que se clavan y la buscan porque quieren salir a solas con ella o incluso que me deje por ellos, pero Vanessa siempre me cuenta como los corta y como les hace ver que perdieron su oportunidad de seguir disfrutando de ella.
De verdad amigos, si nunca han sido cornudos no saben de la experiencia tan excitante que es ver a tu mujer con otros hombres. No saben lo mucho que se acercan en todos los sentidos con sus parejas y de la gran confianza que se forja. Yo cada día amo mas a mi esposa y con cada hombre que ha tenido la oportunidad de tener su verga dentro de ella, mas la deseo y mas amor le demuestro.
Califica esta historia:
Comentarios recientes