Me excita verme al espejo cuando me cogen hombres viejos y feos

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Creo que me estoy volviendo una enferma sexual pero no puedo evitarlo y lo peor es que cada vez me gusta mas. Mi nombre es Verónica, tengo 19 años y tengo novio pero no puedo evitar sentir una fuerte atracción por hombres mayores y entre mas viejos y feos mas me excitan. Me encanta ver en algún espejo mientras me están cogiendo y me prende muchísimo que me traten mal, que me insulten y literalmente traten como puta. Lo extraño es que esto solo me pasa con hombres mucho mayores que yo, con mi novio o con los de mi edad no me causa ninguna emoción y hasta me llega a molestar cuando me tratan como los hombres mayores.

Yo siempre supe que tenia algo raro, aunque pensé que solo era medio puta. Comencé a coger hace ya bastante tiempo, mi novio actual fue como el veinticincoavo que me cogió pero el no lo sabe y de hecho la cuenta ya subió algo mas. Si piensan que son muchos, es porque tengo una amiga que tiene su anuncio como escort y muy ocasionalmente le hago el paro cuando le llegan dos o mas clientes. Yo no me dedico a eso, no me hace falta por ahora porque aun vivo con mis papas y honestamente no nos falta nada sin contar que soy la consentida. Cuando mi amiga me lo pide lo hago por hacerle paro y por el desmadre, pues ni siquiera es que me guste mucho hacerlo con algunos de sus clientes.

Precisamente la primera vez que cogí con un hombre maduro fue con un cliente que mi amiga me pidió que atendiera. Una de las cosas por las que no me dedicaría a ser escort es porque les toca cada tipo tan mas feo y ni modo, a eso están. En esa ocasión, me dijo que eran dos señores ya viejos y que de seguro no nos duraban nada y como no tenia otra que hacer me fui para el hotel donde estaban. Al verlos lo primero que me paso por la mente es decirle que mejor no, nunca había cogido con hombre de mas de 30 años y los dos ya estaban cincuentones. Pero ya estando ahí ni para echarse para atrás y luego luego uno de ellos se me acerco para cachondearme mientras el otro ya estaba cachondeando con mi amiga.

No queria que me besara porque me daba algo de asquito, así que para evitar que quisiera hacerlo le comencé a besar el cuello y le desabroche la camisa para besarle el pecho. Estaba super peludo y canoso, era gordo, no muy alto, olía super rico, incluso cuando le saque la verga para chupársela, seguía oliendo a su perfume. A diferencia de otros que me han tocado, no la tenia dura cuando se la comencé a mamar pero le creció poco a poco y eso que parecía pequeño se hizo algo de bastante buen tamaño. Nos pasamos a la cama y el nunca intento besarme en la boca, se fue directamente a chupar mis tetas mientras me masturbaba con una de sus manos. Yo siempre me excito muy rápido y pensé que con el me costaría trabajo ponerme cachonda, pero no fue así.

Creo que fue justo ahí donde empezó mi obsesión por verme con hombres mayores pues en esa habitación tenían un closet con las puertas de espejo y mientras estaba acostada recibiendo las chupadas de tetas del señor, podía mirarnos de cuerpo entero. Francamente siempre he sido un poco vanidosa y me gusta verme desnuda en el espejo, creo que no tiene nada de malo que te guste tu cuerpo. Entonces ver mi cuerpo pequeño y delgado junto a ese hombre canoso y arrugado con una panza enorme mientras me chupaba mis tetas me fue poniendo cada vez mas cachonda. No podía dejar de ver en espejo como se veían nuestros cuerpos desnudos, era como ver una película porno pero sabiendo que era yo la que estaba ahí.

Cuando el se monto sobre mi para cogerme, yo ya estaba super cachonda y seguía sin dejar de vernos en el espejo, ósea, literalmente no podía quitar la vista del maldito espejo. Podía ver todo mi costado apastado literalmente por ese hombre hasta casi desaparecer en el colchón y como mis piernas se abrazaban a su robusto cuerpo peludo. No es que fuera una super cogida, pero realmente esta mas excitada de lo que recuerdo haber estado antes. Cuando el me cogía me besaba el cuello y yo misma busque que me besara en la boca y por primera vez sentí la piel arrugada y áspera como esa contra mi cara. Sus besos no eran muy buenos, pero su boca a pesar de que tenia un ligero olor raro, no precisamente desagradable, simplemente raro, me gustaba y ya no permití que dejara de besarme mientras me seguía cogiendo.

Ya no me miraba tanto en el espejo, estaba mas concentrada disfrutando de ese señor del que ni me acuerdo como me dijo que se llamaba. Aunque en algunos momentos mientras me besaba con el, intentaba mirar de reojo nuestro reflejo. Finalmente no aguanto mucho, se vino y se tumbo a mi lado todo cansado. Nunca se porto mal conmigo, nunca fue brusco y ni siquiera hablo, pero me excito mucho verme cogiendo con el. unos minutos después, cuando se habían recuperado, quisieron cambiar de pareja y el que se cogió a mi amiga me queria coger a mi. No quise cambiarme de cama porque del lado donde estaba mi amiga no había espejo y sin decirles porque, les dije que se cambiaran ellos. Ni siquiera yo entendía muy bien porque mi obsesión por verme en el maldito espejo.

Este otro señor era un poco mas viejo que su amigo, pero menos gordo y mas alto, pero su verga era mas chiquita aunque mas gorda. Se la chupe pero busque acomodarme de forma que pudiera verme en el espejo y no se muy bien que me excitaba mas, si verme a mi misma chupándole la verga al tipo y verlo a el desnudo con su carne algo caída. Se puso el condón y quiso que me montara sobre el y fue aun mas fácil para mi vernos en el espejo. De verdad mi imagen reflejada era como si fuera de otra persona y me excitaba verla moviéndose sobre el anciano. También me puse muy cachonda y lo bese en la boca, aunque a el si que le olía un poco mal de igual forma de estaba gustando y me sentía super excitada. Aunque como dije antes, su verga era no muy grande, cuando me empezó a decir que era una pequeña puta ya no pude contenerme y me vino un orgasmo como pocas veces había tenido.

El señor ya no duro mucho y se vino conmigo arriba sin decirme que ya había terminado, pero yo estaba tan cachonda que queria seguir cogiendo. Me di cuenta que ya se había venido porque se salió su verga y prácticamente yo solo me restregaba contra el pero igual se sentía rico. Estuvimos solo un rato mas y nos salimos del hotel para ir a la casa de mi amiga donde me daría mi parte de ese servicio. Yo estuve tentada a decirle a mi amiga como me había sentido pero ella hizo el comentario de que eran unos viejos asquerosos y preferí ya no decirle nada de lo mucho que me había gustado. La pobre hasta se estaba disculpando por llamarme para hacerle el paro con tipos como ellos, pero para mi había sido una experiencia muy cachonda.

Durante algunos días no podía dejar de pensar en porque me había excitado tanto coger con los viejos esos. No era que me volviera a excitar, pero no entendía porque me había sentido así. Creo que al día siguiente había cogido con mi novio y ni cerca estuve de venirme aunque me gusta coger con el siempre que podemos. Unos días después recuerdo que me vi con un amigo que ya no vive en la ciudad y nos fuimos a coger y me paso lo mismo que con mi novio. Lo disfrute, me puse cachonda y aunque justo también había un espejo en el motel a donde fuimos, no me excite tanto como con los viejos. Pero la verdad unas semanas después ya ni me acordaba de los viejos que me pusieron tan cachonda.

Mi amiga me llamo un par de veces para que le hiciera el paro con otros clientes y no paso nada especial, eran los clásicos de entre 25 a 35 años. Hasta que unas semanas después me llamo para decirme que tenia un cliente que no podía atender porque ya había quedado con otro y no queria quedarles mal porque los dos eran frecuentes. Me dijo que uno de ellos era un viejo de unos 60 años muy castroso y el otro era un señor de unos 35 que solo pedía que no fuera maquillada ni perfumada. Ella de buena onda me dijo que fuera con el mas joven y ella se aventaba al viejo y casi por instinto, sin pensarlo le dije que no, que me dejara al viejo. Le extraño que pidiera ir con el viejo y lo único que se me ocurrió decirle es que a lo mejor podía hacer que terminara mas rápido.

A este señor lo tenia que atender en su casa y me dio la dirección para que llegara. Tenia una casa bonita, se ve que tenia dinero porque me abrió un empleado de el y me dijo por donde llegar a la recamara donde me esperaba. Toque la puerta y me dijo que pasara, el ya estaba desnudo y se estaba sirviendo una copa. Era bastante mayor, yo la verdad le calculo mucho mas de los 60 que dijo mi amiga, era gordo, alto, muy canoso y con cara de enojado. Me invito una y le dije que no, que muchas gracias, entonces me miro y me dijo que no le gustaba que fueran mamonas. Me sentí un poco nerviosa porque se ve que tiene el carácter fuerte, pero le dije que no era mamona y que al contrario era muy complaciente, solo que no podía tomar porque vivía con mis papas. Con una risa burlona como si no me creyera me respondió que eso le había dicho mi amiga.

El señor se sentó en una silla de un escritorio que tenia en su recamara y me dijo que le bailara. No soy muy buena bailando pero lo obedecí y cuando me trate de acercar a el para cachondearlo, me dijo que no, que siguiera bailando. Tomaba su copa mientras me veía bailar, me decía que estaba muy rica, que se notaba que me encantaba la verga pero que no creía que tuviera 19 años. El decía que seguro tenia como 16 o máximo 17 pero que no tenia problema con eso y pues la verdad, yo tampoco, si no me creía era su problema. En la siguiente canción que sonó me dijo que me fuera desnudando y mientras yo lo hacia el se comenzó a masturbar. Cuando ya estaba bailando encuerada me decía que me iba a mandar a mi casa bien culeada y apestando a verga para que mis papas se dieran cuenta de lo puta que era su hija. Francamente me ponía un poco nerviosa sus comentarios, parecía un depravado y solo porque mi amiga ya me había puesto al tanto de como era, sino en serio me hubiera ido.

No tengo tanta experiencia como mi amiga tratando clientes de su anuncio, ella todos los días atiende a dos o tres, yo solo había atendido unos 20 desde que la conocí y la mayoría habían sido muy tranquilos y educados porque ella me los escogía. Este señor no tenia pelos en la lengua, aunque parecía de dinero era mas vulgar para hablar que cualquier otro cliente que hubiera atendido. Cuando me dijo que fuera a manársela me puso en el piso en medio de sus piernas sin moverse de su silla. Si tenia la verga algo grande, aunque no la tenia tan dura, me la comenzó a embarrar por todos lados mientras me decía que su verga era mas grande que mi cara.

Comencé a chupársela y todavía no se la sentía tan dura, se abrió de piernas y me dijo que le chupara la ingle y los huevos. El era blanco pero tenia muy oscura toda la zona de sus genitales y por dentro de las piernas, supuse que era por la edad, pero por alguna razón me excito mucho chuparle por todos lados. El no dejaba de decirme que era muy puta y cada vez me sentía mas excitada solo de sentir su piel en mi boca y lengua. No estoy muy segura pero creo que yo hasta me estaba tallando la panocha y ya estaba tan cachonda que le comencé a decir que si era bien puta y que me encantaba su verga. Ósea, no es algo que no hubiera hecho antes, pero en verdad me sentía mucho muy excitada chupando a ese viejo.

Después de un rato de mamarle la verga y chuparle los huevos y las piernas, comencé a chupar la barriga y me fui subiendo para chupar su pecho. El me pregunto si ya queria tener su verga adentro y le dije que si, que necesitaba sentirlo adentro mío. Saco un condón de su escritorio y me dijo que se lo pusiera. Mi amiga me enseño a ponerlos con la boca y así lo hice, me monte en la silla y me acomode su verga en mi panocha. Me entro toda y comencé a moverme sobre el, pero aun sentía su verga un poco aguada, aun así, como estaba de frente a el me excitaba ver su cara arrugada y con una barba de algunos días sin rasurar. Pero conforme me movía sobre su verga la fui sintiendo mas rígida y fue cuando realmente comencé a disfrutar. Yo misma busque besarlo en la boca y a este realmente le olía a una combinación de licor y caño pero me excitaba sentir su lengua jugando con la mía.

En un par de ocasiones se me resbalo el pie de la silla, era obvio que era incomodo, entonces el cargo sin sacarme la verga y llevo a la cama donde me acostó y se quedo sobre mi. Realmente pesaba mucho y me empujaba su verga con fuerza, me sentía un poco sofocada y no paraba de decir que era toda una puta pero me estaba encantando. Estaba tan cachonda que ni siquiera sentí que me venia un orgasmo, cuando me di cuenta mi cuerpo ya estaba temblando y el seguía cogiéndome levantado mis piernas hasta casi mi cabeza y dejando caer todo su peso sobre mi. Increíblemente unos minutos después me saco un segundo orgasmo que fue mucho mas intenso y necesita estirar mis piernas pero no me dejo. Con nadie había tenido dos orgasmos casi seguidos y el placer que sentía era inmenso.

Sus cogidas no se detenían, ni tampoco dejaba de decirme que era muy puta, cuando me dijo que desearía dejarme bien llena de sus mecos, yo misma le dije que se quitara el condón. Nunca, pero nunca había cogido con un cliente sin condón y miren que hasta dinero me habían ofrecido y con el, estaba tan caliente que queria sentir como se venia adentro de mi. El me saco la verga y de un par de jalones se quito el condón y me la volvió a meter. No queria que terminara porque estaba lo que le sigue de cachonda, pero como ya teníamos algo de rato cogiendo, pensé que no tardaría mucho en venirse. Ni madres, el viejo me volteo y me puso a cuatro patas, me dio unas cuantas chupadas en el culo y mi panocha y me la volvió a clavar. Para ese momento empezaba a oscurecer y la luz de adentro de su recamara hacia que nos reflejáramos un poco en una ventana grande que tenia que llegaba hasta el piso.

Ver en el reflejo como me tenia de a perro y ver mi cuerpo pequeño y flaco comparado con el suyo me calentó aun mas de lo que ya estaba. Yo no podía dejar de gemir y pedirle que me siguiera cogiendo, que me siguiera dando verga hasta que me echara sus mecos bien adentro. El me tomo de la cintura y luego de mis piernas, nuevamente sin sacarme la verga me levanto y me cargo para cogerme cargándome de espaldas a el. Parecía que sabia de la obsesión que estaba tomando de verme porque camino hasta su vestidor y nos metimos después de que prendió la luz. Se paro frente al espejo y me siguió cogiendo mientras yo miraba como me tenia cargando con las piernas bien abiertas y podía ver como su verga me entraba y salía de la panocha.

Estábamos cogiendo así cuando comenzó a llevarme a mi limite de cachondez diciéndome, -Mírate pinche puta que rica te vez bien abierta y con mi verga hasta adentro. Yo le respondía que si y que me encantaba como me veía. También me decía, -Eres una pinche mocosa y ya estas bien usada. ¿Qué dirían tus papas si supieran como traga verga la puta de su hija? Aunque eso no se lo respondí, yo sentía que la sangre me hervía y me comenzó otro orgasmo mas. Yo trataba de que me bajara y hasta trate de patalear, en verdad necesitaba estirar mis piernas y agarrar mi panocha porque sentía que me ardía de lo caliente que me tenia pero no me dejo. Me tenia bien sujeta de las piernas y con mis manos lo agarraba del cuello para no caerme de frente. Me la metió un poco mas y por fin se comenzó a venir con una cantidad de semen impresionante. Yo pensaba que a los viejos les salía menos semen, pero al menos a el le salían muchos.

Yo podía verme en el espejo abierta de piernas con su verga adentro de mi panocha y como salían literalmente chorros de su semen que se escurrían por sus huevos y caían al piso. Era por mucho la mejor cogida que me habían dado y el tipo era realmente feo y viejo, pero cogía delicioso. Hasta que terminamos de coger di cuenta que tenia ropa de mujer en el vestidor, también hasta entonces me dijo que se llama Gregorio y me pidió mi numero para llamarme directamente a mi y no a mi amiga. Nunca le había dado mi numero a ningún cliente de mi amiga, pero a el si se lo di. Aunque le pedí que fuera muy discreto porque en verdad no me dedicaba a eso y me seguro que lo seria porque el es casado y tampoco queria problemas.

Normalmente el servicio que mi amiga ofrece es por una hora, yo me quede poco mas de las dos horas con Gregorio y si el hubiera querido cogerme de nuevo con gusto me hubiera quedo mas sin cobrarle nada. Me despedí de el con ricos besos y le dije que no me queria ir pero que ya era tarde. Eso fue hace 4 meses y he vuelto a su casa al menos unas 5 veces y cada vez me deja bien cogida. Su esposa viaja mucho por que tienen negocios en Estados Unidos y por eso puede llevarme a su casa. Aun se me hace un hombre que da miedo, tiene un carácter muy fuerte y con la cara de enojado pues peor. Yo cuando voy le cobro lo mismo que le cobraba mi amiga, de todas formas las ultimas veces me da un poco mas y una ocasión antes de la ultima vez, hasta me dio de regalo una pulsera de oro. Pero en serio que no lo voy a atender por el dinero, me encanta ese hombre, me vuelve loca cuando me coge y ya sabe que me gusta verme cogiendo con el y pone un espejo frente a la cama cuando voy.

Yo no saldría con hombres tan grandes como Gregorio, creo que me daría pena, pero me encanta como cogen y sobre todo como me veo cuando estoy con ellos. En los últimos meses casi no apoye a mi amiga con servicios, pero me volvió a tocar un maduro que también me hizo llegar a un orgasmo y creo que se me están haciendo obsesión los viejitos. Tanto que cuando voy en la calle y veo a un maduro que me voltea a ver, no puedo evitar mirarlo e imaginar como cogerá. Aun así, estoy con mi novio, no lo cambiaria por ningún viejo, pero sexualmente me vuelven loca, me excitan mucho los hombres maduros y entre entre mas feos, mas cachonda me pongo. Aunque creo que tiene que ver mucho con como me veo yo en el espejo cuando estoy cogiendo con alguien tan diferente a como me veo yo. O talvez me excita sentir que están abusando de mi, que me están usando, porque es verdad que cuando me hablan vulgar y me dicen algo que tenga que ver con mi edad, mas cachonda me ponen.

Todo esto no se lo he platicado ni siquiera a mi amiga y miren que nos contamos todo, creo que me da pena que me diga que estoy loca por excitarme con los ancianos.

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