Dos veces atrape a mi esposa siendo infiel y la perdone para volverme cornudo
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Hace 4 años atrape a mi esposa Elia cogiendo con un compañero de su trabajo en mi propia casa y casi se acaba nuestro matrimonio. Los celos y el enojo son incontrolables cuando sabes que te ven la cara de pendejo. Ella suplico que la perdonara y que todo había sido porque se sentía sola. Nos separamos por unos meses y termine perdonándola, pero yo pensaba que la confianza ya nunca regresa después de algo así.
No había pasado ni un año cuando nuevamente sospeche que andaba con alguien mas y un día que salí temprano me fui a su trabajo a espiarla. Parecía que todo era normal hasta que ya en la parada la recogió un coche y se fueron a meter a un motel que esta a unas cuadras.
Esta vez le dije que era definitivo y que se largara de la casa, pues grabe con mi celular cuando se subió al coche y cuando entraron al motel. Ella me hizo un drama y nuevamente me suplico que la perdonara, entonces la encerré en la recamara para que no escuchara mi hijo y le dije que si queria que la perdonara, tenia que ser sincera. De todas formas todo se había ido ya a la chingada y su única oportunidad era decirme toda la verdad.
Yo aun estaba encabronado y le hable con insultos y gritos preguntándole si le gustaba andar de puta y que sin tanto necesitaba otras vergas para estar contenta. Ella no dejaba de llorar mientras me respondía que si, que no podía evitarlo, que me amaba con todas sus fuerzas pero que no podía evitar decir que si cuando un hombre la invitaba a coger. Le pregunte con cuantos me había engañado y entre llanto me respondió que con algunos. Le grite preguntándole ¿Cuántos son algunos? ¿ 2, 3 5, 10? Y ella entre llanto me respondía que no sabia. Yo le afirme que entonces serian mas de 10, porque se tendría que acordar de todos o por lo menos decirme que con unos 10 y listo, pero no podía hacerlo porque en realidad la muy puta no tenia ni idea.
Cuando le dije que por lo menos me dijera con quienes que yo conociera se había revolcado, ella solo me decía, “¿Para que? no tiene caso”. Como chingados no va a tener caso saber con quienes de mis conocidos me había visto la cara de pendejo. Entonces después de tanto insistirle, me dio el nombre de un par de vecinos, de uno de mis amigos, el compañero de su trabajo con el que la atrape la primera vez y de otro compañero mas.
En realidad la muy puta me había estado engañando todo el tiempo desde que nos casamos en el 2011 y no podía contener mi enojo y la corrí de la casa en esos momentos. Pasaron unos días hasta que volví a hablar con ella y me rogo para que la perdonara y en esos momentos sentí lastima porque se veía bien jodida y porque no podría ni ver a su hijo si la demandaba por adulterio.
Finalmente le dije que podía quedarse en la casa y que solo se olvidara de mi como pareja y que de todas formas nos tendríamos que divorciar. Pero con unos meses viviendo juntos de nuevo la perdone, pero cada vez que me la cogía me la imaginaba cogiendo con otros y aunque al principio me daba coraje de nuevo, finalmente me comencé a excitar con la idea.
Entonces un día le hable claro y le dije que como de todas formas nuestro matrimonio ya había valido madres, que si queria revolcarse de nuevo con otros, que estaba en su derecho, pero que yo también podría hacer lo mismo con otras. Elia me juraba que no lo necesitaba y no lo volvería a hacer aunque la dejara, pero era mas que obvio que la que nace puta, puta se queda.
Entonces un fin de semana que invite a unos compañeros a ver un partido, ya mas de noche solo nos quedamos platicando mi amigo Marzo y yo. Desde hacia tiempo que Marzo no perdía la oportunidad de decirme que mi esposa era muy guapa y como ya me sentía algo borracho le dije a Elia que cogiera con el. Ella no queria, pensaba que lo hacia por joderla o para humillarla, pero le dije a escondidas de mi amigo que si queria que la perdonara de verdad, tenia que hacer lo mismo que hacia a mis espaldas pero frente a mi.
Acepto pero le daba pena que la viera coquetearle a Marzo, le dije que era una hipócrita por haber cogido con quien sabe cuantos a mis espaldas y pero frente a mi y con mi permiso ponerse payasa. Honestamente queria verla coger con mi amigo como venganza, para desquitarme de ella y hacerla sentir como la puta que era. Era como hacerle ver que si lo hizo a mis espaldas, tenia que hacer lo que yo quisiera y con quien yo quisiera.
Me di cuenta que Elia se sentía incomoda de que yo estuviera ahí mientras ella trataba de llamar la atención de mi amigo, pero tenia que aguantarse. Marzo estaba borracho pero no podía ignorar las insinuaciones de Elia y llego un momento que se sintió incomodo y dijo que mejor se iba. Entonces yo intervine y le dije a Marzo directamente, “No mames, siempre estas diciendo que te gusta mi vieja, pues órale cabron, cógetela ahorita, les doy permiso”. Elia trato de callarme pero la mande a la chingada diciéndole, “¿Te gusta la verga no? júrame que no te lo cogerías si yo no estuviera y tuvieras la oportunidad, pues les estoy dando permiso”.
Marzo insistió en irse y mirando fijamente y con coraje a Elia le dije “Órale mi amor, quedamos que te lo ibas a coger ¿no? y se quiere ir… hay tu sabes”. Me pude dar cuenta que se le pusieron los ojos llorosos pero fue a donde estaba Marzo y le dijo que si, que queria hacerlo con el. Me parece que Marzo no se dio cuenta que yo estaba obligando a Elia y cuando ella le dijo que si queria coger con el, Marzo me volteo a ver preguntándome si era en serio y si en verdad no había problema.
Después de confirmarle a Marzo que no había problema siempre que lo hicieran frente a mi, se volvió a quitar la chamarra que ya se había puesto. Elia se sentó a su lado en el sofá y lo comenzó a acariciar en las piernas mientras se le repagaba. Marzo dijo que le daba un poco de pena y le dije con voz tranquila a Elia “Mi amor, dile a Marzo que no se preocupe, cuéntale que eres bien puta y que te gusta la verga”. Ella no dijo lo que dije que dijera, pero le confirmo a Marzo que era cierto lo que yo había dicho.
Comenzaron a besarse y Elia casi se le montaba encima mientras Marzo comenzaba a acariciar las tetas de mi esposa aun sobre la ropa. Yo francamente esperaba que me diera asco, esperaba sentir repulsión por la mujer de la que había estado enamorado y que era la madre de mi hijo. Esperaba que verla con otro me hiciera odiarla y así sacarme los pocos sentimientos buenos que tenia por ella.
Pero la realidad es que apenas comenzaron a besarse y manosearse, la verga se me paro y me sentía sumamente excitado. Aun así, no decía nada, me quede callado solo mirando como la puta se fajoneaba con mi amigo. Ella le saco la verga y se la comenzó a chupar mientras Marzo me miraba ocasionalmente y me daba las gracias inocente a mis intensiones originales. Elia siempre fue buena dando mamadas y no decepciono a Marzo pues claramente ya se había puesto cachonda a pesar de que lo hizo bajo mis chantajes.
En ese momento yo hubiera deseado saber que pasaba por su mente, pues yo la estaba obligando a hacerlo como venganza y ella sabia que estaba encabronado. No tenia forma de saber que verla con mi amigo me tenia super excitado y mas cuando me di cuenta que ya estaba cachonda.
Ellos se comenzaron a quitar la ropa y Elia se detuvo para preguntarme si tenia algún condón. Le respondí tranquilamente, “¿Que? ¿Me vas a decir que siempre has usado? de todas formas no tendría por que tener… ¿Tu si?” Refiriéndome a los pendejos con los que me había engañado y no respondió nada. Inmediatamente le pregunte a Marzo si no tenia problemas con irle a pelo a mi esposa y el dijo que no. Ella ya solo en calzones regreso a chuparle la verga a Marzo quien ya se había desnudado.
Un par de minutos después Elia se monto sobre Marzo y puso su verga en la entrada de su panocha. Aunque estaba a unos dos metros podía ver que la tenia mojada y cuando froto la verga de Marzo buscando que se le metiera mi verga parecía que queria reventar. Yo ni siquiera me tocaba para que no diera cuenta que estaba excitado, pero cuando la verga de Marzo se fue metiendo en la panocha de mi esposa, no pude evitar venirme. Nunca me había venido sin tocar para nada mi verga, pero ni siquiera eso me calmo, yo seguía excitado y ahora con una mancha de semen en mi pantalón.
Elia no tardo mucho en olvidarse de que yo estaba ahí y se comenzó a dar unos sentones durísimos sobre la verga de mi amigo. Marzo agarraba las tetas de mi esposa con sus dos manos y las chupaba mientras le decía que estaba muy rica. El la acostó en el sofá y se puso entre sus piernas. Elia no tardo en decirle, “Así, así, no pares” y yo mientras ya no aguantaba lo excitado y frotaba mi verga pero sobre mi pantalón aun húmedo por mi venida anterior. Marzo no pudo mas y se vino dentro de mi esposa y darme cuenta de eso provoco que de nuevo me viniera.
Marzo se quito de encima de mi esposa y me dio de nuevo las gracias y prometiendo que seria discreto con eso. La realidad es que ni siquiera había pensado que se podía correr la voz de que mi esposa era una puta y que yo la prestaba. Le dije a Marzo que no se preocupara y que mejor ya se fuera. Mientras el se vestía Elia tomo su ropa y sin decir nada y ni siquiera voltearme a ver se metió al baño de abajo a vestirse. Yo despedí a mi amigo en la puerta y hasta ese momento reaccione y le pedí que guardara el secreto de lo que había pasado.
Cuando regrese adentro, Elia aun seguía encerrada en el baño y le dije que saliera. Supongo que espera reclamos míos y salió con la cabeza agachada mientras me preguntaba si ya estaba contento. No se porque, pero mi coraje se había ido, la abrace con fuerza y la bese diciéndole que la amaba y que me había dolido mucho que me engañara. Ella se solo a llorar un poco y me dijo que le había dado mucha pena con Marzo. Sin molestarme ni dejar de abrazarla le dije, “Pero bien que te pusiste cachonda cuando te cogía y le decías que no parara”.
Nos fuimos a la recamara y ya en la cama seguimos platicando y aunque queria meterse a bañar, no la deje con el pretexto de hablar sobre lo que nos estaba pasando. Le hice ver que si, que lo había hecho como venganza y no porque estuviera borracho. Pero que si ella había sido capas de coger con otros a mis espaldas, se me hacia justo que lo hiciera frente a mi. Le confesé que me había excitado al verla con Marzo y mientras le explicaba lo que había sentido, ella me jalaba la verga y me la puso dura rápidamente.
Le dije que queria insultarla cuando comenzó a besarse con Marzo, que queria gritarle que era una pinche puta arrastrada, pero que al sentirme excitado se me paso el enojo. Ella me dijo que lo hubiera hecho para desahogar mi coraje y que de todas formas lo hubiera entendido. Le dije que no lo volviera a hacer sin decirme y ella me juro que nunca mas me seria infiel y que se ganaría mi confianza.
Le dije que la chupara y mientras lo hacia, de nuevo la calentura me hizo decirle que no me molesto verla con Marzo, al contrario me había excitado mucho y que no queria que me fuera fiel, queria que me dijera todo. Aunque nunca paso por mi mente ser un cornudo, me tenia muy excitado el haberla visto con marzo. Elia me saco una venida mas con sus chupadas, pero lo cachondo no se me bajaba. La acosté y me puse sobre ella y mientras me la cogía le pregunte que sintió de que la viera coger con mi amigo.
Elia me respondía que mucha pena, pero yo le insistí en que la vi muy cachonda, le dije que no me importaba que cogiera con otros siempre que fuera frente a mi. Le pregunte si podía acostumbrarse a que yo estuviera presente y ella me dijo que no sabia pero que le daba miedo que me enojara. Le dije que pensé que me molestaría mas, pero que me había gustado y que queria volver a verla cogiendo. Ya mas cachondo le dije que me gustaba saber que mi esposa era una puta que le encantaba la verga de otros. Nunca la había insultado hasta que la atrape siéndome infiel. Pero cachondos fue otra cosa y ella me preguntaba si de verdad no me molestaba que fuera una puta y yo le decía que me encantaba.
No paramos de coger durante un buen rato y aunque yo esa vez no le dije, me prendía mucho saber que me estaba cogiendo a mi mujer recién que otro se la cogió hasta venirse en ella. Creo que no fue la mejor manera de descubrir que me gusta ser cornudo, pero de una u otra forma, eso cambio nuestras vidas. Ahora ya tenemos 4 años de llevar una relación abierta, donde ella puede acostarse con quien quiera siempre que yo lo sepa.
Al principio llevo solo a un par de amigos de ella en diferentes ocasiones. Pero después la confianza creció de nuevo, pues ya no tenia necesidad de ocultarme nada porque sabia que me gustaba. La deje que se viera sola con otros y cada vez me daba cuenta que en verdad ella necesita mucho mas sexo del que yo puedo darle. Lo que en principio vi como traición y una mala decisión al elegir a mi mujer como esposa, ahora lo veo como una bendición.
Aun así, todo es un proceso que se debe llevar con total comunicación y confianza que se debe mantener. La realidad es que por algún tiempo aun me llegaban pensamientos de si aun me ocultaba cosas y poco a poco Elia me ayudo a quitarme esas dudas. He leído varias historias de como otros matrimonios entran a este rico juego de ser cornudo y los felicito. Cada matrimonio es diferentes y las circunstancias son diferentes, pero siempre la comunicación y confianza es primordial.
Elia al cabo de algún tiempo me platico de todas sus aventuras con detalles y nombres, al menos de los que se acordaba. Ya no tiene la necesidad de esconderse o esconder nada. Pero les recomiendo que si eres infiel y no puedes evitarlo, mejor lo platiques con tu pareja y acuerden probar algo de mutuo acuerdo. La infidelidad duele mucho y no todos tienen la suerte de una segunda oportunidad con la persona a la que engañas.
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