Cuido mi cuerpo para gustarle a los hombres y elegir con quien coger

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Hola, soy Ninette y soy una chica de 31 años dedicada casi al 100% al cuidado de mi físico, estoy casada y tengo una nena de 11 años, el motivo de que escriba hoy aquí, es porque hace unos días platicando con una de mis mejores amigas, entramos en debate porque considera que tanto esfuerzo para cuidarme es para sentirme bien conmigo misma. Sin embargo yo no pienso así, pero no puedo ser tan abierta con ella o con alguien mas, pero la realidad es que comencé a cuidarme desde muy jovencita para gustarle a los hombres y esa es mi inspiración.

Mi amiga aunque no es fea, es un poco gordita y dice que así se siente bien, también esta casada y dice que así la ama su esposo y que no necesita hacer tanto ejercicio como yo para sentirse bien. Yo por mi parte le digo que mantenerse en buena forma hace que el marido se mantenga interesado en una y que así, aunque el se fije en otras, se la pensara dos veces antes de perder lo que tiene en casa. Así que no solo lo hago por sentirme bien conmigo misma, también para gustarle a los hombres y eso para mi es lo principal.

Ahora, hablando de realidades, les platico que dese niña yo siempre fui muy coqueta, siempre tuve la fantasía de gustarle a todos los hombres, pero era gordita. En una época en la que me urgía perder la virginidad, me fije en un hombre mucho mayor que yo y quería que el fuera el primero, me le ofrecí quitándome toda la pena de encima pero me desprecio de la peor forma. Yo sabia que era porque era gorda y me prometí que nunca ningún hombre me volvería a despreciar y comencé a hacer mucho ejercicio.

Para cuando cumplí los 17 años, ya podía notar el cambio en los hombres, ya no solo me veían, literalmente me rogaban hombres de todas las edades para que saliera con ellos, aunque en realidad sabia que lo que querían era acostarse conmigo. Incluso el baboso que me rechazo comenzó a buscarme y obviamente me vengue rechazándolo muchas veces.

Ahora bien, cuando conocí a mi esposo André, yo andaba de cabrona con muchos y ninguno sabia de los otros, pero me enamore y comencé a dejar de verme con otros poco a poco hasta que solo salía con André. Después de dos años de novios nos casamos porque salí embarazada y creo que ahí fue cuando se rompió el encanto. Yo nunca he dejado de hacer ejercicio y había muchos chicos (y no tan chicos) que me pretendían sabiendo que era casada e incluso algunos son amigos de André. Trabajo fue que aceptara ser infiel una primera vez, después de eso ya no me pude resistir y cada que un chico me gusta, me doy ese gusto de pasarla bien. Pues como les dije antes, siempre tuve la fantasía de gustarle a todos los hombres y ya de adulta, pues lógicamente no es para solo sentirme bien por gustarles.

A mi me encanta el sexo, me encanta sentir la emoción de ese primer encuentro con alguien nuevo y si no me cuidara tanto no podría elegir con quien y tal vez hasta no tendría con quien y tendría que conformarme con quien fuera. Curiosamente no me gustan los hombres musculosos o flacos, prefiero los gorditos, tienen algo que me vuelve loca, sentir su panza sobre mi me excita mucho pero eso si, entre mas altos mejor. Yo mido 1.60 y me gusta que me carguen, que me muevan como se les antoje, que me den nalgadas y sentirme sometida o incluso aplastada por un hombre grande mientras me están cogiendo. Algo que no tengo con mi marido, pues el es de cuerpo atlético, pues lo conocí en el GYM y también le encanta el ejercicio, pero aunque es guapo, no es tan alto como me gustaría, apenas mide 1.75.

Ya entrando mas en lo sexual, el ejercicio también me da mucho aguante que supongo que siendo gordita o muy flaca no tendría, se que voy a sonar muy puta, pero he cogido hasta con 8 hombres en el mismo día sin ni siquiera cansarme. No importa con cuantos haya cogido en el día, no recuerdo llegar a la noche a coger con André y decirle que no porque estoy cansada. He hecho tríos varias veces pero hace unos años cogí con 5 chicos al mismo tiempo durante toda una noche y ninguno de aguanto el ritmo, yo todavía tenia ganas y ellos ya no podían. Todo eso se lo debo al ejercicio y es otro de los motivos por los que me encanta mantenerme en forma y no solo para sentirme bien con migo misma como dice mi amiga.

Retomando el tema de mi amiga, se dice segura de que su marido la ama y que así la acepta, pero hace como 5 años me acosté con su esposo algunas veces y no paraba de decirme que lo volvía loco mi cuerpo y hasta la fecha no pierde oportunidad para intentar acostarse de nuevo conmigo, pero ya no le hago caso. Si en verdad mi amiga se cuidara y se hubiera mantenido como cuando éramos mas jóvenes, su esposo no andaría de cabron queriendo cogerme de nuevo y eso que ya pasaron como 5 años.

Otra ventaja de hacer ejercicio es que puedo usar lo que sea, cualquier ropa no se me ve mal, por ejemplo, me encanta usar shorts o minifaldas y a mis 31 años, si ando en la calle vestida así, aunque también cuando uso jeans ajustados o leggins pasa, pero me pitan los coches y nunca falta que me digan algunos piropos y eso me gusta. Por cierto, no entiendo a las estúpidas femenazis y sus pendejas ideas según ellas progresistas, que mas bien parecen de siglos pasados al juzgar a los hombres por lanzar piropos o tratar de acercarse en la calle a una mujer para acostarse con ella. A mi me gusta y estoy segura que a muchas también, un piropo por muy vulgar que sea, es porque les gustaste y si tratan de ligarme en la calle, pues bien venidos, al final yo decido si acepto o no irme a coger con ellos. No exagero cuando les digo que he andado yo sola por lugares de mala fama y hasta ahorita nunca me han ni siquiera tratado de violar, por el contrario, se han ofrecido a acompañarme para cuidarme y no importa si finalmente lo que buscan es cogerme, como dije, yo decido.

Dejemos el tema de las feministas, porque se que hablar de ellas va a causar que muchas se ofendan, pero quiero dejar mi punto de vista en claro, la realidad no es como un grupo de viejas locas adoctrinadas en esa secta quieren hacerlo ver, estoy de acuerdo que se castigue la violencia a las mujeres, en la igualdad de oportunidades, pero de eso a castigar hombres por hacer su luchita con nosotras, es una estupidez. Mi trabajo me ha costado tener mi cuerpo como quiero como para que unas tipas me digan que los hombres me ven como objeto sexual, cuando hasta hay mujeres que también quieren acostarse conmigo, eso no es cosa de hombres o mujeres, es cosa de la naturaleza humana, somos seres sexuales que a diferencia de los animales, tenemos sexo porque nos gusta y punto.

También con el ejercicio descubrí lo excitante que me resulta el olor a sudor de hombre, al principio solo me gustaba saludar a algún compañero o instructor y oler su sudor. Ahora me encantan los hombres apestosos a sudor, no hay nada mas rico que coger y terminar bañados en sudor. Me encanta sentir que el macho que me esta cogiendo escurre su sudor sobre mi y chupar su piel sudada me hace llegar a orgasmos riquísimos.

Finalmente, cada quien su vida y cada quien sus gustos, no soy nadie para obligar a que hagan algo y tampoco nadie puede decirme a mi que hacer o que no hacer, mucho menos tengo que explicar porque lo hago. Pero escribir aquí me sirvió para desahogar un poco lo que la platica con mi amiga me hizo sentir y lo que me gustaría decirle abiertamente, pero por desgracia no todas las personas son de mentalidad abierta y verían mal lo que aquí escribo, como seria el caso de mi amiga.

En conclusión, yo pienso según mi propia experiencia, que la mayoría, si no es que todas las mujeres y hombres que nos cuidamos, es para gustarle al sexo opuesto (o a los del mismo sexo según gustos) y tener muchas mas opciones para elegir con quien coger, lo aprovechen como lo hago yo o no. Así que ejercitarse no solo para sentirnos bien con nosotras mismas, eso es un plus que da el ejercicio y que muchas personas usan para justificar que se cuidan a pesar de ya tener pareja “segura”. Incluso mi esposo, yo estoy consiente que es guapo y que se cuida, aunque a mi ya no me emociona tanto como antes, seguramente hay muchas queriendo coger con el y no es algo que me preocupe.

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