El primer amante de mi esposa es un chico de reparto
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Mi nombre es Carlos, soy un hombre de 33 años casado y con dos hijos, mi relato es sobre lo que ha pasado durante el ultimo año de mi vida. Mi esposa se llama Sandra y es una mujer hermosa de 27 años, no es por presumir, pero ella desde que la conocí me pareció muy guapa y se ha mantenido así, a pesar de sus dos embarazos.
Después de varios años de insistir a mi esposa con mi fantasía de verla cogiendo con alguien mas y de que ella aunque había aceptado que lo intentáramos, pero sin que ella encontrara al hombre que realmente le inspirara confianza, finalmente durante la pandemia, encontró al indicado.
Durante esta pandemia se dio la oportunidad cuando Sandra por fin, acepto que había un chico que le gustaba mucho y que con el se podría animar. Era un chico de reparto de un restaurante al que algunas veces pedimos comida para evitar salir de casa y comenzamos a pedir mas seguido.
Durante las rápidas visitas del chico para entregar la comida, Sandra comenzó a atenderlo y cada vez platicaba mas con el. Yo no me acercaba para no causar nerviosismo en alguno de ellos, quería que las cosas se dieran sin ninguna presión. Así que cada que llegaba Alejandro (así se llama), yo entretenía a mis hijos para que no fuerana molestar la platica de su mamá.
Finalmente uno de esos días, Sandra me dijo que se había besado con el y que lo invito a pasar al estacionamiento, dice que aunque un poco tímido, acepto y entre nuestros coches se besaron otra vez pero mas largo y cachondo. Finalmente no paso a mas, pero ya estaba todo servido y listo para que pasara.
Simplemente de saber que Sandra se había besado con Alejandro me ponía la verga dura y no se me bajaba hasta que me la cogía y durante esa tarde me la cogí dos veces y una mas en la noche hablando de como se besaron. Yo le decía que fuera descarada y que fuera al grano, pero ella decía que no, que el chico era poco mas joven que ella y que se sentiría como una abusadora.
Esa noche no paramos de platicar del tema, ella tenia algunas dudas todavía, no quería que mis hijos se dieran cuenta y le dije que yo los tendría ocupados, le insistí que fuera al grano, que no lo dejara escapar, ella se excitaba de pensarlo pero no quería hacerlo así. También me pregunto que hacer con los condones porque no teníamos en casa, fue la primera vez que hablamos de cuidarse, pero la calentura me hizo decirle que se lo cogiera así, ella se puso aun mas cachonda, se veía que le excitaba la idea pero aun así decía que no lo conocía y que no quería que le contagiara algo.
Finalmente la convencí de hacerlo así, al natural pues era un chico joven y claramente deportista, yo le dije que no se preocupara y se dejara llevar. Al día siguiente pedimos nuevamente comida al restaurante y Sandra lo recibió usando una falda corta bastante suelta, estaba nerviosa pero al mismo tiempo ansiosa después de que llamamos.
Cuando sonó el timbre de la casa, me dio un beso en la boca y me dijo, “mira lo que me haces hacer, estas loco y nos vamos a ir al infierno”. Yo me quede encerrado en la recamara de mis hijos jugando con ellos xbox, pero tenia la verga parada de pensar en lo que estaría haciendo Sandra.
Tardaron como media hora o un poco mas, pero yo sentí eterno, quería que Sandra entrara y me contara cada detalle. Cuando escuche que cerro la puerta de la casa, salí corriendo a verla, ella tenia una cara que nunca voy a olvidar, era entre cara de traviesa, cachonda, no se, una cara que nunca había visto en ella.
La abrace de la cintura y le pregunte si había pasado y me respondió que si, la metí a la recamara y sin perder tiempo la desvestí mientras le pedí que me platicara. Me dijo que se volvieron a meter al estacionamiento y que se volvieron a besar, que ella dejo que le acariciara las nalgas y que se sentía muy mojada. Alejandro le dijo que se tenia que ir, pero ella tomo una de sus manos y la puso en su panocha, el ya no dijo nada de irse y le comenzó a meter los dedos.
Mi esposa tiene unas piernas muy bonitas y un culo sabroso a pesar de ser delgada, se que Alejandro no se hubiera podido resistir a aprovecharlas. Dice Sandra que Alejandro le pregunto por mi mientras le metía los dedos y que ella le dijo que no estaba, entonces fue cuando el se saco la verga para que ella lo acariciara y que solo se la jalo un poco y se agacho a chupársela.
Dice que tiene la verga larga pero no muy gruesa y curveada hacia arriba, que se excito mucho de mamarla porque nunca había visto una con esa forma. Tampoco es que ella tuviera mucha experiencia, yo fui el cuarto hombre en cogérsela y el ultimo hasta ese día. Dice que la recargo en el Sentra y le quería meter la verga pero no se acomodaban y la acostó sobre el cofre, Sandra se disculpo porque sabe como lo cuido pero me valió madres, le dije que no importaba que hubieran doblado todo.
Me dijo que ni siquiera mencionaron nada de condones o de si se venia afuera o adentro, dice que se la cogió bien duro y que no paro hasta que se vino adentro. Por aquí me estaba diciendo eso y yo ya estaba encima de ella metiéndole la verga, sentí como tenia la panocha entre mojada y pegajosa, les juro que se hacia espuma, supongo que eran los mocos de Alejandro que se estaban batiendo con las metidas de verga que le daba a mi mujer.
Me vine riquísimo y ella también, fue una cogida solo en una posición, pero mas intensa que ninguna otra. Le hice prometer a Sandra que se lo cogería todos los días y que cuando ella lo creyera oportuno, le dijera que yo estaba de acuerdo y que podía venir a la casa cuando quisiera.
Durante la siguiente semana pedimos todos los días y cada día era lo mismo, Sandra y Alejandro cogían en el estacionamiento mientras yo entretenía a los niños, pero quería verla y aun no se daba esa oportunidad. Lo que si pude notar, es que cada día, Sandra se miraba mas suelta, con menos pena y con mas ganas de ver a Alejandro y eso me gustaba.
Finalmente paso como semana y media de la primera vez que cogieron cuando Sandra me dijo que ya le había dicho y que lo había invitado a cenar. Me dijo que el no estaba muy convencido y que quien sabe si se animaría a venir, pero poco después de las 9:00 de la noche tocaron el timbre y Sandra salió a recibirlo, tardaron en entrar, después Sandra me dijo que no quería pasar pero al final paso.
Mis hijos aun estaba despiertos pero cenamos y platicamos tonterías con el, como a las 10 mande a dormir a mis hijos y fui con ellos a su recamara para dejar a Sandra a solas con Alejandro. Me espere hasta verlos dormir para salir de su recamara y cuando llegue a la cocina, vi a Sandra y a Alejandro a los besos en la sala. Puta madre! la verga se me paro como si tuviera un resorte, era chingonsisimo ver a mi esposa fajando con un cabron en nuestra sala.
Me quede sentado en un banco de la cocina mirando como ellos se comían a besos y como Alejandro le metía tremendas manoseadas a Sandra, ella me miraba por momentos como diciendo “mira mi amor lo que le hacen a tu esposa”. Vi cuando ella le desabrocho el pantalón y le saco la verga para chupársela, yo ya me estaba masturbando. Después Sandra se monto sobre Alejandro que seguía sentado en la sala, ella solo se levanto la falda y vi que hizo a un lado su tanga para que le entrara la verga.
Estaban cogiendo bien chingon, Sandra se movía sobre el y Alejandro le agarraba las tetas y las nalgas tanto como podía. Era la primera vez que veía a Sandra coger con otro y me tenia bien cachondo, los deje coger un rato en la sala y después les dije que nos metiéramos a la recamara.
Ella se acostó y jalo a Alejandro sobre ella, nuevamente se la comenzó a coger pero ahora con las piernas al hombro y me excito mucho ver las lindas piernas de mi esposa levantadas con un cabron en medio de ellas. No se cuanto tiempo cogieron, pero yo me vine como tres veces masturbándome, Cuando Sandra me pidió que me acercara y me acostara junto a ellos.
Podía oler el sudor de los dos, podía sentir el olor a sexo y mientras Alejandro se la cogía de perrito, ella me agarraba una pierna y me enterraba las uñas cuando le entraba la verga hasta adentro. Por momentos Sandra me masturbaba un poco y trataba de chupármela pero no podía por los empujones que le metía Alejandro, pero no me molestaba que no pudiera ayudarme a mi, yo solo quería seguir mirando como se cogían a mi esposa.
Finalmente Alejandro dijo que se iba a venir y yo mismo le dije que se viniera adentro, soltó unos gemidos y se los dejo ir todos adentro a mi mujer. Ella se tumbo hacia adelante y quedo boca abajo, me estaba acariciando y me dijo, “que rico mi amor, ¿te gusto?” y claro que le dije que me había encantado.
Nos quedamos un rato platicando con Alejandro y le dejamos la invitación a venir a la casa cada fin de semana con la condición que nos avisara para decirle si se podía o no, pero que cuando pidiéramos comida, estaba en libertad de seguir cogiendo con Sandra en el estacionamiento de la casa. Desde entonces ya pasaron algunos meses y se coge a mi esposa por lo menos 3 o 4 veces a la semana sin contar que ha venido a la casa otras 4 o 5 veces en la noche en fin de semana.
Alejandro es el primer amante de mi mujer, ahora la estoy convenciendo de que tenga mas amantes, quiero verla con varios hombres diferentes y la idea parece que le agrada, ya les estaré contando que pasa, espero convencerla.
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